Su antigüedad data del año 3000 a.C. en Egipto, donde fueron halladas en viejas tumbas. Los antiguos egipcios la empleaban en anillos de oro y collares. En la península de Sinaí se encuentran las minas más antiguas del mundo.
Los comerciantes de Turquía, en el siglo XII llevaron a Europa esta piedra a través del Medio Oriente y por esto lleva el nombre de Turquesa. Esta piedra preciosa antigua es muy valorada en casi todas las civilizaciones del mundo. En las antiguas culturas persas y en las nativas de América fue considerada la piedra ornamental más famosa. Actualmente sigue siendo muy popular, y es muy cotizada por su color único de azul turquesa, siendo la única en el mundo que lleva el nombre de su color. Más información en reino-minerales.es.
Por ser porosa, tiende a teñirse con facilidad. Esto se hace para mejorar en ocasiones el azul de las más verdosas; aunque estas pueden desgastar los colores con los años. Su brillo es opaco, por esto muchos comerciantes le ponen alguna solución o cera para que tenga algo de brillo. Es muy importante que esta piedra se lave solo con agua. Esta piedra es comúnmente usada en collares y pulseras.
Tradicionalmente se podía encontrar esta piedra en Israel, Irán, Rusia, Egipto y al sur de los Estados Unidos. En la actualidad es extraída en China, Irán, Afganistán, Australia, Polonia, Alemania, Chile, México y en Nevada y Arizona en Estados Unidos.
Características de la Piedra Turquesa
En cuanto a la mineralogía, tiene estas características:
• Color : Verde, verde azulado.
• Dureza : 5 – 6 en la escala de Mohs.
• Forma : Irregular, transparente.
• Descamacion : Buena.
• Transparencia :Opaco
Tipos de piedra turquesa
Piedra natural
Este tipo de piedra son más valiosas y son usadas para joyería, vienes de varias partes del mundo, pero las más cotizadas vienen de China, África y Canadá.
Piedra tratada
Esta piedra como dice el nombre, tratada, ha estado bajo un proceso para mejorar su nivel de calidad, ya sea con barniz, aceites o cera, para así ir mejorando su color, aunque la calidad siempre va a ser más baja que las piedras naturales.
Hay una creencia que al final del arco iris encontraríamos una turquesa. Los Mayas y Aztecas apreciaban esta piedra en sus ceremonias como protección, posteriormente fueron llevadas por nativos americanos desde América del Norte hacia América del Sur. En la actualidad muchos yacimientos antiguos de esta piedra se han agotado a lo largo del tiempo, pero existen pequeñas explotaciones mineras que siguen produciendo piedras de alta calidad.
Beneficios de la piedra turquesa
Posee diversas propiedades y virtudes, se dice que esta piedra es una piedra para la purificación. Aleja la energía negativa y es llevada para protección de contaminantes o influencias externas del medio ambiente. Equilibra los chacras, transmite paz interior y un mejor humor, ayuda a eliminar el cansancio, depresión y ansiedad. Favorece para resolver problemas, estimula la amistad y el amor.
Tenemos entre los principales beneficios de esta piedra, los siguientes:
Relajación: Se dice que tiene el beneficio de ser un buen calmante, baja el nivel de tensión nerviosa, la tensión y el stress. Es excelente para la ansiedad y los cambios temperamentales. Fortalece el alma y en general todo el cuerpo. Esta maravillosa piedra también puede aliviar el agotamiento, la depresión y todo malestar de índole nervioso.
Curación: También se cree que ayuda a aliviar muchas enfermedades, como por ejemplo la gota, depresión, asma, problemas estomacales, infecciones de garganta, pulmón y reumatismo, sobretodo artritis y artrosis. Causa una gran mejora en el sistema inmunológico, facilitando la desintoxicación de todo el organismo. Para obtener mejores beneficios se debe mojar la piedra en agua, y de esa manera conseguiremos tener un mejor flujo energético por todo nuestro cuerpo. Asimismo, nos provee mucha energía del cielo y del mar, que son necesarios para nuestro bienestar.
En Feng Shui se le conoce como la piedra de la comunicación, porque se dice que es muy buena para las personas que tienen algún tipo de miedo a hablar en público. Nos da muchas ganas de vivir haciéndonos sentir mucha paz interior y a querer relacionarnos mucho mejor con nuestros seres queridos. De igual modo, nos incrementa la empatía, el valor, la sabiduría, la honestidad, la elocuencia, la creatividad, los pensamientos positivos, ayuda a controlar los nervios, nos da paz interna, equilibra los cambios de carácter, de humor y nos alienta a una mejor autorrealización.
Reconciliación: Mantiene la armonía, estabilidad y entendimiento entre las parejas en su vida matrimonial, a la vez que ayuda a mejorar la vida sexual. La energía que posee esta piedra, la vuelve en ideal para estar en los dormitorios de los niños o adolescentes, la oficina, o la sala. Nunca se debe colocar bajo el sol directamente. Es muy probable que ayude a mejorar la relación sentimental, sobre todo si se está pasando por una ruptura o alguna dificultad. También dicen que esta piedra tiene la propiedad de cambiar de color ante la amenaza de una infidelidad.
Protección: También te cuida y protege de los malos pensamientos y la energía negativa. Antiguamente se creía que, si el portador estaba enfermo, el color de la piedra sufría un cambio, y una vez pasaba el peligro, la piedra volvía a su color. A la vez, es aconsejable llevarla las personas que viajan, porque te protege de los accidentes, robos o cualquier peligro.
Liderazgo: También se dice que promueve la buena inversión y un gran sentido de liderazgo. Da motivación y mucho valor a aquellas personas que tienen equipos a su cargo.
Suerte: Hace siglos que se atribuye a esta piedra preciosa muchas bondades como larga vida, fortuna, y mucha felicidad.
La piedra turquesa es una piedra con gran poder de protección como curativo, además de hermosa, te puede dar muchos beneficios. Podemos profundizar en la Litoterapia, terapia que usa piedras para el equilibrio del organismo. Así que, si tiene la oportunidad de adquirir una de estas piedras, no lo duden.