Normalmente, cuando uno decide empezar una dieta, le viene a la mente un nutricionista. Este profesional especializado en ciencias de la alimentación ofrece consultas para desarrollar un enfoque integral de la pérdida de peso. Un dietista no es un médico, sino sólo un asistente médico. Por lo tanto, actúa más como un reeducador nutricional, porque está perfectamente formado en la calidad de los alimentos y su valor calórico. Por lo tanto, tiene la función de un acompañante cotidiano.
¿Qué es un nutricionista?
Un nutricionista es un médico especializado en nutrición. Puede tratar diversas patologías que requieren un seguimiento dietético, como la diabetes o la obesidad. El nutricionista realizará un diagnóstico y propondrá a los pacientes un seguimiento dietético. Puede prescribir análisis adicionales para aclarar su diagnóstico.
El papel del nutricionista es múltiple. En primer lugar, es responsable del diagnóstico correcto del problema nutricional del paciente. A continuación, se encarga de identificar las causas de cualquier trastorno alimentario o condición patológica. También ayuda al paciente a recuperar un buen equilibrio nutricional, una buena salud y puede ser llevado a crear una dieta terapéutica a medida y adaptada. Si busca un nutricionista en París, visite www.nutritionniste-paris.fr.
¿Cuándo debo consultar a un nutricionista?
Puede consultar a un nutricionista para que le dé su opinión sobre sus hábitos alimenticios. Esta experta en salud le ayuda con su equilibrio nutricional diario y le da una idea de cómo comer más sano.
El dietista parte de un diagnóstico preciso de sus hábitos alimentarios, su familia, su situación profesional, su estilo de vida y su estado de salud para poder darle los mejores consejos.
La primera razón para contactar con un nutricionista es, por supuesto, el sobrepeso. Tanto si sólo ha perdido unos kilos como si es propenso a la obesidad, un dietista encontrará una solución para usted. Tras estudiar su estilo de vida actual, las razones que le han llevado a ese estado y los objetivos que desea alcanzar, establecerá un plan de acción. Desde una dieta personalizada hasta un programa deportivo, un nutricionista conoce los mecanismos de la alimentación, el cuerpo y la salud.
El sobrepeso no es el único motivo por el que se puede consultar a un dietista. Por el contrario, la delgadez, la anorexia y la bulimia también pueden darse en adultos, adolescentes y niños. Un dietista también puede ayudar con los cambios de vida, como dejar de fumar, el embarazo, la menopausia, que tienen un impacto en el cuerpo e implican una adaptación o incluso cambios en la dieta. Un dietista le examinará si tiene problemas digestivos o una enfermedad crónica causada por su dieta.
Como puede ver, hay muchas razones para acudir a un dietista. El nutricionista se ha tomado primero el tiempo de escuchar al paciente sobre sus hábitos alimentarios, su historial médico, sus antecedentes y su posible patología. Es posible que tenga que escuchar y tomar medidas concretas. También puede pedir otras pruebas, como análisis de sangre, para aclarar su diagnóstico.
Le explicará e informará al paciente de la estrategia de tratamiento que va a aplicar. Esto puede incluir la dieta, la medicación, el ejercicio, etc. A menudo es necesario un seguimiento regular para que la nutrición adecuada sea eficaz.
¿Por qué elegir un nutricionista en lugar de un dietista?
Un nutricionista es un médico especializado en nutrición, mientras que un dietista es un técnico que ha superado un certificado técnico superior en dietética. Un nutricionista puede gestionar diversas patologías, prescribir medicamentos o exámenes médicos y hacer un diagnóstico. El dietista tiene un papel más bien didáctico en materia de higiene alimentaria. En particular, se ofrece a seguir a las personas que desean iniciar una dieta adaptada.
Otra diferencia fundamental es que las consultas con un dietista no están cubiertas por el seguro médico. Sin embargo, algunos seguros médicos complementarios pueden cubrir parte del coste de una sesión. Actualmente está demostrado que consultar a un médico y a un nutricionista aumenta las posibilidades de perder calorías con éxito.
"Los consejos también permiten prevenir mejor las enfermedades crónicas, como la diabetes o las enfermedades cardiovasculares, en las personas de riesgo", explica el Dr. Serfaty-Lacriosnière. En última instancia, esto también conduce a una mayor comodidad diaria para los pacientes con síndrome del intestino irritable o dolores diversos, ya que la dieta puede ser antiinflamatoria.
¿Mutuas y seguridad social para una consulta con un nutricionista?
La consulta con un nutricionista en París está fijada en unos pocos euros. Sobre esta base, el Assurance Maladie reembolsará el 70%. El seguro médico adicional puede cubrir el 30% restante. Siempre hay que consultar a la aseguradora para obtener el reembolso.
Los nutricionistas también pueden practicar la sobrealimentación. Una vez más, el seguro médico complementario ofrece diferentes reembolsos. Hay que tener en cuenta que algunos casos de asesoramiento pueden ser reembolsados en su totalidad por el seguro médico, como el asesoramiento para mujeres embarazadas o personas con enfermedades de larga duración.